“Tuve la oportunidad de ser voluntario a principios de 2020, en un momento en que la represión contra los refugiados era extremadamente fuerte y la pandemia hacía la situación aún más complicada. Sin embargo, la actuación del proyecto en ese momento fue fundamental para ayudar a los jóvenes a integrarse en la sociedad y el mercado europeo, brindándoles la posibilidad de construir una vida con dignidad después de sus luchas”.
